Las cadenas para llantas son algunas de las piezas de equipo más importantes destinadas a mejorar la tracción y proporcionar estabilidad al conducir tu vehículo por carreteras cubiertas de hielo o nieve. Dichas cadenas están hechas de eslabones metálicos que se unen entre sí y luego se enrollan completamente alrededor del neumático de un vehículo. Ahora, la idea de colocar cadenas en tus llantas puede parecer intimidante al principio, pero créeme, después de unas cuantas veces lo harás como si fuera algo natural.
Comienza eligiendo el tamaño adecuado de cadenas que se ajusten perfectamente a tus neumáticos. Coloca las cadenas planas sobre el suelo y conduce lentamente sobre ellas con tu vehículo. Después de haber posicionado tu coche en el centro de las cadenas, engánchalas por encima de cada neumático y asegúralas. Al igual que una bicicleta de carretera, las cadenas en las ruedas necesitan mantenimiento regular para funcionar de la mejor manera. Revisa si hay eslabones rotos o perdidos, y señales de óxido / desgaste. Si en cualquier caso se detecta un problema con las cadenas, se debe reemplazarlas rápidamente.
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